Aunque yo pensaba que para retocarse ya no se necesitaba de esos encuentros casuales, el espejo del portal, que con el móvil en modo autorretrato ya se se bastaban, la fotografía que nos traes es un tesoro, no sólo la escena, lo que has captado como documento, sino también el cómo las has cogido: el hecho de que sean tres, que a una le haga gracia que hagas la foto, que a otra le sorprenda, que a una tercera le dé igual... Entiendo que has tenido que recortar y reencuadrar porque si no eres tienes que ser el más rápido del oeste a la hora de ver-seleccionar-encuadrar-enfocar-disparar. Enhorabuena en cualquier caso.
Y un saludo.